Nos hemos cansado de viajar a los mismos lugares, de los agobios y las multitudes. Buscamos pequeños pueblos donde empaparnos de sus costumbres y tradiciones, mezclarnos con sus vecinos y vivir una experiencia única. Así es como llegamos directos hasta el proyecto vanwoow y ser canteros por un día ¿Vienes a conocerlo?
El proyecto Wanwoow pone de relieve los valores arquitectónicos, tradicionales, paisajísticos y humanos que atesoran los micropueblos,pueblos de menos de 500 habitantes, a través de experiencias únicas en las que podemos participar autocaravanistas y amantes del mundo camper en general. Y es genial, porque resulta ser un auténtico proyecto que lucha contra la despoblación y el olvido de los pequeños pueblos que despiertan para mostrarnos con orgullo que allí hay un mundo por descubrir.
Nuestra experiencia vanwoow nos lleva hasta el valle de Nansa, en Cantabria, un lugar con una enorme riqueza patrimonial,cultural y paisajística, que además cuenta con extensos bosques de hayas y robles que son el refugio de una variada flora y fauna. Allí nos encontramos con Susana y Ángel, porque lo cierto es que esta visita la realizaremos guiados por ellos: Nansa Natural,los mejores guías rurales que podemos encontrar en «La Tierruca».
Realizamos una ruta interpretativa de la naturaleza con un recorrido a pie de 6km que incluye parte del antiguo Camino Real, desde el mirador de la Cruz de Cabezuela hasta la frontera con Palencia. Siguiendo este antiguo camino de oficios, poco domesticado y rodeado de picos nevados, caminamos despacio y disfrutando del paisaje. Aprendemos sobre la biodiversidad de esta zona que además está incluída en la Red Natura 2000. Atravesamos bosques de robles, hayas y abedules, algunos cubiertos por unos líquenes de color verdoso. ¿Sabíais que la presencia de este líquen indica una buena calidad del aire? No podía ser de otra manera 😉 Además, en nuestro caminar observamos con atención los rastros de animales, como excrementos de lobo o huellas de corzos que con ayuda de nuestros guías de Nansa Natural reconocemos e interpretamos. En resumen, el paseo es una auténtica reconexión con lo que fuímos y hemos ido olvidando: seres que forman parte de la naturaleza.
Tras el paseo nos dirigimos a Pejanda, a la Posada y Restaurante Casa Molleda. Una vez más nos dejamos aconsejar por nuestra guía, Susana, para acercarnos a conocer la gastronomía de este valle: Cocido montañés, carne de potrillo guisada y un riquísmo helado de turrón hacen nuestras delicias.
Pero para que esta experiencia fuera redonda y nos hiciera disfrutar del medio rural de forma diferente, nos dirigimos al encantador pueblo de La Lastra, donde conoceremos el antiguo oficio de cantero. En el taller de talla de vicente Diestro somos “canteros por un día”. Realizamos dos tallas de piedra bajo las explicaciones y correcciones de Vicente. Dos piedras de arenisca son la base de nuestros trabajos, que primero marcamos a lápiz y después tallamos a golpe de cincel. Parece sencillo en un primer momento, pero se requiere de destreza, fuerza y sobre todo técnica. La experiencia, algo muy diferente a todas las que hemos realizado hasta ahora,nos ha dado la oportunidad de conocer de cerca un antiguo oficio y nos ha hecho valorar los trabajos de los auténticos artesanos como Vicente.
“Canteros por un día” es tan solo una de tantas experiencias que ofertan los guías de Nansa Natural por toda Cantabria y además pronto estará disponible dentro de la oferta del proyecto Vanwoow.
1.- El bar Restaurante Parrilla El Carmen, en Cosío. Se trata de un area de autocaravanas privada donde el restaurante ofrece un pedazo de terreno para la estancia de nuestros vehículos. Se pueden vaciar las aguas negras y grises y llenar con limpias. La primera noche es gratuíta.
Coordenadas:
43.23333 / -4.39806
N 43º 13′ 60» / W 04º 23′ 53»
2.- Por otra parte el aparcamiento de Tudanca, que ha sido recientemente completado con una zona de mesas de madera y barbacoas, nos brinda la oportunidad de pernoctar junto a uno de los pueblos más bellos e interesantes de este valle. Se puede visitar su caserío declarado Conjunto Histórico y la Casona de Tudanca, una antigua casa de indianos con mucha historia.
Coordenadas:
43°09’08.7″N 4°22’32.6″W
43.152417, -4.375722
“Canteros por un día” es una experiencia única, una auténtica immersión en las costumbres y tradiciones del alto Nansa que nos da la oportunidad de conocer sus gentes y oficios de una manera muy directa. Además, pasear por la montaña observando y sientiendo el bosque hace de este paseo una verdadera reconexión con la naturaleza en esta sociedad que ya va resultando excesivamente urbanita. ¡No me digáis que no os apetece ser canteros por un día!
Qué bonita experiencia familia! Nos ha encantado el relato y detalle. Toda una inmersión en un micropueblo!
Hola Auxi! Esta es una experiencia que quedará grabada para el recuerdo 🙂 También en sentido literal. ¡Nadie se la debería perder!
Nos gustaría saber en qué fechas podríamos pasar unos días?