Si planeas hacer una ruta por la Costa Licia en furgoneta camper o autocaravana y lo que quieres es descubrir los mejores lugares del sur de Turquía, este es tu artículo. Te proponemos una ruta auténtica por 15 lugares imprescindibles de la conocida Costa Turquesa que nos conducirán a través de lagos, gargantas, los mejores yacimientos arqueológicos y espectaculares cascadas.
Sube a nuestra furgo, Nautilus, y te mostraremos qué ver en una ruta por la Costa Licia, dónde pernoctar con tu autocaravana o furgoneta y nuestras mejores recomendaciones gastronómicas.
¿Nos vamos de ruta por La Costa Licia en furgoneta?
En este tramo de la costa sur de Turquía, entre Fethiye y Antalya, se asentó una federación de 19 ciudades independientes, los licios (S. XII a.C), que excavaron cientos de tumbas en las paredes rocosas representando casas que utilizarían en el más allá, así como sarcófagos de varios tipos. Encontramos lugares increíbles que no dejan de sorprendernos, podría decirse que aquí das una patada a una piedra y sale un sarcófago de debajo.
La Costa Licia o Costa Turquesa es sin duda el tramo más bello e interesante porque esta franja al sur de Turquía contiene el gran legado de los licios: sus tumbas. Es por eso que los lugares de visita que elegimos para esta ruta son imprescindibles en este viaje alrededor de Turquia con nuestra camper. Es la segunda vez que visitamos el país y esta zona de costa turca en concreto la recorrimos hace años en goleta, no obstante, tenemos que confesar que nos sigue fascinando. Esta vez hemos regresado con nuestra furgoneta camper, lo que nos ha dado la ventaja de vivir el viaje de una manera muy auténtica. ¿Y si os contamos que encontramos un sarcófago de hace miles de años en medio de la carretera y tuvimos que girar en torno a él porque era una rotonda? ¿Y si hacemos spoiler y adelantamos que en esta ruta existe una gran cascada que se precipita desde un gran acantilado al mar Mediterraneo? ¿y si os contaramos que hemos nadado entre sarcófagos? En Turquía todo es posible.
📌 UN BAÑO DE BARRO Y AGUAS MINERALES EN LAS TERMAS DE SULTANIYE
📌 ADMIRAR DESDE EL BARCO LAS TUMBAS REALES DE KAUNOS.
📌 CONOCER LA VIDA DE LAS TORTUGAS EN EL CENTRO DE RESCATE E INVESTIGACIÓN DE LA PLAYA IZTUZU.
📌 ADMIRAR LAS 4.000 CASAS DE LA CIUDAD ABANDONADA DE KAYAKÖY.
📌 MARAVILLARSE EN EL VALLE DE LAS MARIPOSAS.
📌 NAVEGAR SOBRE LA CIUDAD SUMERGIDA DE KEKOVA.
📌 NADAR ENTRE SARCÓFAGOS EN LA CIUDAD DE SIMENA.
📌 SORPRENDERSE ANTE LAS TUMBAS EXCAVADAS DE LA CIUDAD DE MYRA.
📌 VISITAR LA CASCADA DÜDEN, UNA AUTÉNTICA SORPRESA TURCA.
Köycegiz Gölü es un gran lago unido al Mediterráneo por el río Dalyan. Uno de sus mayores atractivos es acudir a relajarse y divertirse en las fuentes termales de Sultaniye, así que nosotros nos apuntamos. Buceando en internet damos con el Area de autocaravanas privada Sultaniye (40LT/ noche con termas), que además de acoger a las autocaravanas en su aparcamiento es el lugar en el que se encuentran las instalaciones para tomar los baños termales. Pasamos la noche aparcados, junto al lago, y antes de desayunar, ya estábamos probando sus aguas sulfurosas. El recorrido completo consiste en darse un baño de barro, compuesto de aguas minerales un tanto radioactivas, ricas en cloruro, sodio, sulfuro de hidrógeno y bromuro. Vamos como para pegar un trago. Cuidado con meterse a lo loco , porque tiene una temperatura al menos de 40 grados. Tras estar un rato al sol y quedarte un poco acartonado lo ideal es ducharse e ir a relajarse a las aguas sulfurosas que hay en varias pozas, algunas preparadas en plan spa y cubiertas y otras naturales situadas junto al lago.
Atención porque entre las 11:00 y las 12’30 horas de la mañana el lugar se llena de tours que llegan hasta Sultaniye en barcas desde Dalyan, así que lo ideal es disfrutar de los baños antes o después.
Después, lo más interesante es realizar una travesía por el lago Köycegiz Gölü hasta Dalyan y visitar las ruinas de Kaunos. Seguramente es lo que nosotros habríamos hecho si no hubiéramos tenido que acudir al hospital de Ortaka, porque nuestro hijo tenía una otitis externa.
Tr la consulta, al menos pudimos llegar a pasar la tarde en los muelles de Dalyan y ver las Tumbas Reales del yacimiento de Kaunos desde la otra orilla del río. El embarcadero y rivera del río son lugares ideales para pasear y tomar algo relajados; no así el pueblo, fagocitado por restaurantes con poca personalidad y chiringuitos cutres.
No se nos ocurre nada mejor que terminar el día en el Dalyan Lemon Camping Restaurant para disfrutar de una auténtica cena otomana y quedarnos a dormir. Lo primero, se cumplió con creces. Pudimos probar un magnífico Hünkar Begendili, un plato a base de carne de ternera con “delicias del sultan” : puré de berenjena asada con queso. Toda una delicia y un plato tan generoso que no lo pudimos terminar.
Dormir con nuestra furgoneta camper sin embargo fue misión imposible, puesto que a la entrada de la zona de acampada, un auténtico verjel en la parte trasera del Restaurante, había colocado una especie de arquillo y la furgo no pasaba por la altura. Finalmente, nos quedamos a pernoctar sin ningun problema en la parte exterior, junto al restaurante.
Circulando entre el lago Köycegiz y Dalyan encontramos repetidamente una señal de tortuga que nos pide precaución. No vimos ninguna tortuga terrestre cruzando la carretera, no al menos ese día, pero enseguida el pensamiento nos llevó a las tortugas de mar. La tortuga boba (Caretta-caretta), una especie marcada en rojo en la lista de animales en extinción, todos los años regresa a esta costa, la Costa Licia, para anidar. Como imaginaréis, no ha sido sencilla la convivencia entre tortugas y humanos en un lugar tan turístico. Durante los años 70 hubo un proyecto para construir y convertir la playa de Iztuzu en un gran resort. Fue por aquel entonces cuando llegó en su barco a estas costas Kaptan June (June Haimoff), una mujer inglesa que se instaló en una cabaña de la playa y junto a ecologistas turcos luchó para detener esta locura, creando más tarde la Sea Turtles Conservation Foundation.
Anzuelos, redes de pesca y hélices de barco provocan el 90% de las heridas a las tortugas. El reparto de protectores de hélices a barcos que realizan excursiones para los turistas ha sido un punto clave para la ayuda a la protección de la especie en esta zona.
Este es un tema que nos mueve, por eso nos acercamos hasta la playa Iztuzu, donde visitamos el Centro de Rehabilitación, Rescate e Investigación de la Tortuga Marina. Vimos la barraca del Kaptan June, hoy deshabitada, un pequeño museo y algunos ejemplares de tortuga marina rescatados y atendidos por voluntarios. Es una visita indispensable si se viaja con niños en la furgoneta por la Costa Licia de Turquía.
Continuamos en ruta hasta Fethiye, un lugar en el que realizamos una breve parada para visitar la Tumba de Amintas, la magnífica fachada de un templo jónico excavada en una pared de roca (350 a.C) dedicada a Amintas. Y si quieres ver algo curioso te aconsejamos poner rumbo a Kaya Cadessi, porque en esta calle de Fethiye encontramos un gran sarcófago que hace las veces de rotonda. En esa mísma calle también está la tienda de café Coffetti, donde pudimos comprar y reponer para los desayunos de la furgo un riquísimo café de Etiopía. Charlamos con el dueño que nos aconseja que para encontrar camping vayamos a Kalekoy y además nos da su número de teléfono para cualquier cosa, hospitalidad turca en estado puro.
Kayaköy es un gran pueblo fantasma con 4.000 casas de piedra y un par de iglesias que se conservan enteras con sus mosaicos y pinturas originales. Se trata de la antigua localidad griega de Levissi, abandonada por sus habitantes tras la Guerra de la Independencia turca, en 1923. En la década de los 80 alguien quiso construir allí un pueblo de veraneo, pero por suerte, el Ministerio de Cultura declaró Kayaköy Monumento Histórico y hoy podemos disfrutar de sus ruinas, de sus casas derruidas y calles vacías que nos cuentan historias de otro tiempo. Hay que pagar una entrada (5TL), pero si vas al atardecer, momento que te recomendamos por estar el sol bajo y no apretar el calor, pasarás sin pagar.
No te pierdas el momento mágico. Llega cuando asoma la luna e ilumina la ciudad creando una atmósfera muy especial.
A unos 500m de la ciudad abandonada encontramos el Han Camp Restaurant donde nos instalamos para un par de días. Es un lugar de acampada agradable con árboles, duchas, baños correctos y una estupenda piscina para sofocar el calor. Si necesitas hacer lavadoras este es el lugar. La lavadora con jabón cuesta 10TL.
Si pensais recorer La Costa Licia en furgoneta o autocaravana os recomendamos dos planes que no os debeis perder y pueden realizarse desde aquí:
1.- Desde Kayaköy parte una ruta de senderismo, el tramo de la Ruta Licia entre Kayaköy y Oludeniz, de unos 8km, que recorre parte de la costa y brinda vistas espectaculares. En verano hay que llevar un sombrero y una mochila con agua para el camino.
2.- Otro plan es hacer una escapada con la camper o autocaravana para visitar el Valle de las Mariposas (Kelevek Vadisi), en la aldea de Faralya. Hasta allí se puede llegar en barco desde Ölüdeniz, desembarcar en la playa y recorrer el valle en busca de las mariposas tigre. Nosotros optamos por ir hasta Faralya con la furgoneta camper, ver el desfiladero y Valle de las Mariposas desde arriba y después disfrutar de una preciosa puesta de sol tomando algo en uno de los restaurantes con terraza que hay junto a la carretera. Tienen soberbias vistas sobre el valle y es un final de jornada espectacular.
Ölüdeniz ya lo conocímos en un viaje anterior y nuestra segunda visita no hizo más que reafirmar la idea que llevábamos en la cabeza de este lugar: Ölüdeniz, con su exuberante Parque Nacional y la larga lengua de playa, es el reclamo perfecto para hordas de turistas que se agolpan en sus ruidosos chiringuitos. Esta vez, pasamos por allí como si nos persiguiera el demonio y, a no ser que lo que te guste sea lanzarte en parapente, mejor no pongas allí los pies.
Continuamos nuestra ruta con la furgoneta por la Costa Licia para visitar las conocidas Gargantas de Saklikent que cortan el escarpado monte Gómbe Akdagi (3016 m), y por donde se filtra agua helada. Son unos 18 km de garganta, en algunos tramos tan estrecha que no pasan ni los rayos del sol. Se accede por una pasarela de madera, pero el camino enseguida nos conduce para meternos al río; primero, sorteando una gran cantidad de rocas; y después, salvando la corriente agarrados a una cuerda. A ratos vamos resbalando, a ratos hundidos en sus heladas aguas hasta la rodilla… Resultó ser una visita espectacular donde nuestro hijo se lo pasó bomba. Nuestros consejos son sencillos:
1.-Programa la visita a primera hora o útlima de la tarde para evitar el agobio de los viajes oganizados.
2.-Lleva calzado apropiado para caminar por el agua (crocks, escarpines, sandalias de río…)
3.- Lo mejor es ir vestido con bañador… Casi seguro que acabarás empapado.
Muy cerca visitamos también la cascada Gizlikent Şelalesi . El acceso es una gran escalinata que desciende hacia el interior de una garganta donde hay que caminar unos 300m para encontrar la caída de agua. Hubiera sido precioso de no haber estado lleno de gente.
Si se os hace tarde para comer, como fue nuestro caso, no es mal plan parar en alguno de los restaurantes a pie de carretera y tomar un plato de Alabalik, trucha con ensalada, y un rico gözleme, el crêpe turco por excelencia.
Gelemis es un pueblo de pescadores que ha sabido guardar su encanto a pesar de la afluencia turística. Acampar en Turquia es libre y en Gelemis lo tienen muy presente, ya que allí, en el mismo centro del pueblo, encontramos una zona de acampada libre acondicionada por el municipio para acoger a los campistas.
Hay varios planes que no queríamos perdernos en Patara y sus alrededores:
Por una parte, El yacimiento arqueológio de la antigua Patara, que puede descubrirse piedra a piedra pagando la entrada; o como nosotros, viendo las ruina de camino hacia la playa, a unos 2 km de Gelemis. No os perdais los sarcófagos y el triple arco triunfal de Modesto. Todo se puede ver desde la carretera.
Por otra parte, la playa de Patara es una playa muy especial. Además de ser la playa más larga de Turquía, con casi 20 km de arenal, está protegida por hermosas dunas en las cuales, entre mayo y septiembre, anidan tortugas marinas. Los nidos suelen estar señalados para que no se pongan toallas o sombrillas sobre ellos. Pernoctar con la furgo o autocaravana en esta playa está terminantemente prohibido y si se quiere llegar en vehículo hay que pagar 30TL, a cambio recibiremos una tarjeta que nos permite realizar 10 entradas durante 10 días.
Además de las ruinas de Patara nos hubiera gustado visitar las de Janto y Letoon, pero en nuestro viaje los días están contados y continuamos en ruta.
Kas es un pueblo costero bastante turístico y aún así se puede respirar a Turquía. La parte del puerto es la más animada. Tiene una buena colección de casas de estilo otomano construidas en madera y forradas de bougambillas. Aunque la gran sorpresa de pasearse por Kas llega cuando al final de la calle Unzun Carsi Sokak, “Calle Resbaladiza”, te encuentras con La Tumba del Rey, un tremendo sarcófago licio colocado sobre la base de un pilar del siglo IV a.C. Suele ser normal encontrarse esta calle muy concurrida, así que hay que tener paciencia para sacar las fotos y poder admirar el sarcófago en soledad.
Al sur de Kas, paramos a pasar la tarde en Buyuk Cakil Patji, una preciosa cala de aguas turquesa y guijarros blancos donde como en casi todas las calas de esta zona cobran unas liras por usar las tumbonas y las duchas. Allí pasamos la tarde bañándonos y haciendo snorkeling. Aquella tarde nos trajo el regalo más bonito de este viaje. No la esperaba. No la buscaba, pero Caretta-caretta, la tortuga boba, me encontró a mí haciendo snorkeling. Estos encuentros ocurren tan solo una vez en la vida. Puedes ver unas imágenes del encuentro con la tortuga boba en nuestro Instagram.⤵
Tras abandonar Kas montamos campamento base en Andriake Café, situado junto al puerto de Demre y muy cercano a las antiguas ruinas de Demre. Allí encontramos por primera y última vez en el viaje más de dos autocaravanas juntas, las de un grupo de italianos que viajan organizados.
Kekova, Simena y Üçagiz son tres visitas imprescindibles en esta ruta por la Costa Licia en furgoneta. Forman el triángulo de oro de la Costa Licia e intentar ver estos lugares turísticos por tu cuenta supone desafiar a los modos de hacerlo establecidos. Aquí todo el mundo pretende vender su excursión. Por un lado, desde Kas te organizan las visitas para todo el día, en bus y barco. Por otro, desde el camping, Andriake camp, también ofertan un barco con comida incluida y te aseguran que NO hay otro modo de ir a visitar la ciudad sumergida de Kekova y la preciosa Simena. Nosotros te contamos cómo visitar Kekova, Simena y Üçagiz a tu aire:
Nuestro plan, menos ambicioso que pasar una jornada completa en barco, nos lleva a recalar primero en el pintoresco pueblo costero de Üçagiz, un encantador pueblo pesquero compuesto apenas por un muelle y cuatro restaurantes asomados al mar. Aunque lo más espectacular es su necrópolis repleta de impresionantes sarcófagos licios, si eres amante del pescado, este es un lugar ideal para comer una buena lubina (levrek) salida de las brasas del Restaurante Hasan. Allí mismo negociamos con un pescador para que nos llevara en su pequeña lancha durante un par de horas hasta las ruinas de la ciudad sumergida de Kekova y Simena. Ya os habíamos dicho que siempre hay otra manera… 😉
De esta manera, por tan solo 150 LT salimos los tres en la pequeña lancha a visitar de cerca las ruinas de Kekova, conocida también como “Batik sehir”, la ciudad susmergida. Nuestra lancha se acercó todo lo cerca que es posible en este área protegida, donde los restos de la ciudad abatidos por un seismo en el siglo II se encuentran a unos 6 m de profundidad y el baño está prohibido. Es un auténtico espectáculo, porque las aguas son tan cristalinas que permiten atisbar las ruinas e incluso los mosaicos bajo el agua.
Después ponemos rumbo a Simena, llamada también Kaleköy, para darnos un auténtico baño entre sarcófagos. Guardado por un castillo de 1440 y protegido por antiguas murallas, este precioso pueblo es accesible solo en barca y guarda una de las estampas más bellas de esta ruta por la costa licia. Lo más impresionante es una tumba sarcófago semisumergida en la bahía.
Demre no tiene nada especial, ni tiene playa ni siquiera es una ciudad bonita. Sin embargo, a un par de kilómetros de Demre se encuentra la sorprendente Myra: Las ruinas de una antigua ciudad licia que prosperó gracias al comercio de incienso con Egipto y Constantinopla. Su pared rocosa tallada de tumbas residencia (esas que se supone iban a utilizar en el más allá) es espectacular. Estas milenarias tumbas estaban repletas de oro, pero fueron descubiertas y saqueadas para desgracia del país.
En esta visita la gran montaña que alberga las tumbas llega a eclipsarlo todo, pero no olvides visitar su teatro romano y los restos esculpidos con máscaras que hay desperdigadas por todo el yacimiento. Sin duda, Myra es uno de los yacimientos más especiales de Turquía, un lugar que no exige demasiado tiempo para la visita, al contrario que Efesso o Bergamo, y tan sorprendente que te dejará con la boca abierta.
El entorno de las ruinas de Myra está abarrotado de chiringuitos que venden objetos a precios desorbitados. Te aconsejamos no parar ni a mirar.
Llegamos al último destino de esta ruta en furgoneta por la Costa Licia : Antalya. Nos pareció una ciudad interesante, la ciudad vieja y el barrio Kaleiçi junto con su magnífica cascada Düden nos ocuparon una jornada entera de visita. Lo que más nos gustó fue la cascada Düden. Es impresionante ver cómo se precipitan al mar Mediterraneo las aguas del río Duden en una gran cascada. Para visitarla hay un amplio parking donde por 10 liras turcas se puede aparcar la furgoneta.
Muy cerca, encotramos el Parque Natural de la cascada Kurʂunlu. Hay que pagar una entrada por acceder, pero es un lugar evocador, repleto de rinocnes naturales con encanto y el lugar ideal para pasar la tarde a la fresca. No olvides llevar calzado cómodo.
Puede que seamos unos románticos, pero fuera de las hordas de turistas que visitan la costa de Ölüdeniz, la Costa Turquesa o Costa Licia en furgo es una de las rutas que más nos gustan de Turquía. Navegar sobre una antigua ciudad sumergida, nadar entre sarcófagos y contemplar las tumbas excavadas del antiguo pueblo licio es una auténtica maravilla. Nos brindan imágenes que parecieran sacadas de una película de Indiana Jhones. Y que decir de sus pueblos: Kas, Dalyan, Fethiye y la antigua Kayaköy nos nos los hubieramos perdido por nada del mundo. Viajar por la costa Licia con autocaravana, además, puede resultar la mar de sencillo. Como ya ves hemos encontrado tanto campings como áreas de autocaravana para pernoctar sin dificultad. Sin duda una ruta que repetiríamos en otro viaje a Turquía con nuestra furgoneta camper.
Esperamos que este artículo te inspire una ruta por la Costa Licia con tu furgoneta o autocaravana y disfrutes de esta zona tan espectacular del sur de Turquía siguiendo nuestos pasos. ¿Vienes a descubrir más rutas en furgoneta camper o autocaravana por Turquía?
Muchas gracias explicar todo tan bien . La verdad es que tengo muchas ganas de conocer la zona. Tengo pensado hacer la ruta desde Estambul pasando por alguna zona del Egeo también. Cuantos días estuvisteis en la zona?
Muchas gracias por compartir
Hola, Lara:
Puede que estuvieramos unos 5 días o quizá 6 por esta zona. La hrmos visitado 2 veces, en 2 viajes diferentes, una en goleta y otra en furgoneta camper. Saludos!