Debabarrena es la comarca más occidental de Gipuzkoa, aunque cuenta también con dos municipios vizcaínos. Además, está atravesada por el río Deba. ¿Te imaginas? A nuestro alcance río, montaña y mar. Esta combinación hace que sea un lugar ideal para la práctica de actividades al aire libre y también para disfrutar de auténticos caprichos gastronómicos basados en productos procedentes de nuestra costa y nuestros valles.
Nos lanzamos en una jornada viajera a disfrutar del turismo activo y la gastronomía recorriendo los rincones de esta bella comarca. Caminaremos sobre las aguas en su costa y trotaremos por sus valles y, de tanto en tanto, descubriremos los mejores fogones de Debabarrena. ¿Nos acompañas a vivir una jornada repleta de aventura y gastronomía?
¿Sabes dónde está Debabarrena?
Comenzamos nuestra jornada de aventura en la localidad costera de Deba. La magnífica playa de Santiago nos sirve de escenario para realizar ejercicios de paddle surf en seco. Unai, de Yako Surf Eskola , nos explica las técnicas de remo, y lo más importante, los pasos para ponerse de pie sobre la tabla sin caer al agua.
A pocos metros, el río Deba que hace de frontera con la vecina localidad de Mutriku, nos espera para subirnos por primera vez a una tabla de paddle surf. ¡Al agua patos! más de una cayó y las risas estuvieron aseguradas.
La verdad es que es una actividad que presuponía sencilla, pero mantenerse sobre la tabla, sacar fotos y no perder la compostura fue tarea ardua. Y como a mí me encantan los retos estoy deseando repetir con Yako Surf Eskola. paddle, surf o lo que se tercie.
Desde la playa de Santiago podríamos haber ido paseando hasta la contigua playa de Lapari y descubrir los secretos del Flysch Negro, el más desconocido del Geoparke de la Costa Vasca. O podríamos habernos dirigido hacia el casco histórico de Deba para contemplar uno de los monumentos medievales más importantes de Euskadi: Andra Mari eliza- Santa María de Deba, una auténtica joya del gótico. Sin embargo, ya nos esperaban en otro lugar y arrancamos entre risas, salitre y arena.
Dejamos la costa atrás para adentrarnos en el barrio independiente de Itziar, donde comer en Salegi jatetxea se convierte en un viaje a caballo entre la cocina tradicional e innovadora. Hace 130 años que este restaurante abrió sus puertas y hoy en día la 5ª generación de la familia Altzibar sigue al frente del negocio. Podemos decir que en Salegi hicieron auténtica gala de su filosofía ya que, por un par de horas, nos sentimos como en casa.
El desfile de platos nos brindó una equilibrada mezcla de novedad y tradición gastronómica:
➡️Salmorejo con falafel: últimamente esta muy de moda encontrar platos acompañados con falafel y tengo que decir que me encanta cómo combina este plato que los egipcios reivindican como propio con tanto ahínco.
➡️Gyoza de basatxerri (carne de cerdo autóctono) : no soy muy fan de las empanadillas japonesas, pero reconozco que rellenas de basatxerri la cosa cambia radicalmente.
➡️Croquetas de bonito con piparra (guindilla frita) con cubierta de lomo de bonito marinado y huevas de trucha. Fue el entrante más sorprendente, sabroso y sobre todo colorido. Creo que todas las comensales comimos primero por los ojos.
➡️Lomo de rape en salsa verde con almejas : siendo una auténtica amante de la cocina tradicional este plato me conquistó por completo.
➡️ Brownie de chocolate con helado de frambuesa: fue el tandem perfecto para terminar esta estupenda comida.
Sin embargo, la comida no es el único encanto de Salegi jatetxea. Su espacioso comedor y el entorno completamente ajardinado hacen que sea el lugar ideal para cualquier celebración. Queda anotado, ¿verdad?
Hubiéramos dado un paseo por Itziar, entre sus casas asomadasa un privilegiado balcón sobre el mar. O quizá hubiéramos visitado la imagen de la virgen de Itziar, en Nuestra Señora de Itziar. Santuario al que el mismisimo Juan Sebastián Elkano donó parte de sus ahorros. Pero no hay tiempo para historias , porque las agujas del reloj no descansan y nuestro chofer espera en la puerta.
A medida que nuestro autobús serpenteaba por el valle en forma de U, el camino se estrechaba más y más. Llegamos a Lastur, un valle kárstico enclavado en el corazón de Debabarrena que además de contar una gran cantidad de opciones para el senderismo tiene un entorno rural envidiable y uno de los paisajes más bellos de la comarca. ¿Más razones para visitarlo? Gailur Zaldiketa Eskola, la escuela ecuestre donde nos presentamos para dar un paseo a caballo, aunque como ahora os contaré fue mucho más que eso.
Izadi y yo, la yegua que me asignaron para realizar el paseo por las exuberantes laderas de Lastur fue mi mitad durante todo el recorrido. Aquí es donde se aprende lo importante que es conectar cuando se trabaja en equipo.
En un primer momento, nos miramos de reojo, pero enseguida nos caímos bien. Durante la marcha, éramos a cada cual más terca: Izadi quería parar a comer todas las olorosas hierbas que se presentaban por el camino, y yo le tiraba para que continuara. al final, llegamos a un entendimiento que solo ella y yo comprendimos, como un código secreto.
Disrfruté muchísimo de esta actividad, aunque os adelanto que los caballos son animales de carácter y hay que enseñarles desde el minuto cero quién manda aquí, sino estais perdidos.
¿Sabíais que Gailur Zaldiketa Eskola oferta también sesiones de hipoterapia? Sin duda los caballos sacan lo mejor de cada persona.
Aprovechamos las últimas horas de la tarde para pasear por las empinadas calles de Mutriku, villa de grandes marinos y cazadores de ballenas. En nuestro caminar, admiramos antigüos palacios y casas señoriales, todas ellas parte del imponente casco histórico de Mutriku, Conjunto Monumental desde 1995. ¿Sabías que de entre todos ellos Arrietakua Jauregia puede visitarse por dentro? Todo un lujo recorrer un espléndido palacio del siglo XVIII, que perteneció nada más y nada menos que al almirante Cosme Damián Churruca.
Nos asomamos a su antigua atalaia sobre el puerto, mientras leemos antiguas historias de balleneros y épicos viajes a Ternua (Canadá). Hoy día ya no se cazan ballenas, pero Murtriku conserva su origen marinero. Muestra de ello es la Primera edición de «Atun Errea», evento que acogía Mutriku ese día en la zona del puerto. Allí pudímos degustar un pintxo de atún asado y visitar los puestos de productores locales, como La Mutrikuarra. Sus productos me encantan y os puedo asegurar que llegan a menudo en la cesta de mi compra.
La tarde se torna aún más calurosa y la algarabía de las piscinas naturales de Mutriku, dos piscinas naturales de tamaño olímpico que se llenan gracias a las mareas, nos hacen pasar envidia. Si no las conoceis, ya estais tardando, son uno de los grandes encantos de esta villa y un planazo para ir en familia.
Finalmente, la noche nos lleva de nuevo de la costa al interior, porque en Elgoibar, en las faldas del monte Morkaiko nos espera un caserío del siglo XVI: Belaustegi baserria. En este caserío parece que se hubiera detenido el tiempo. Nos maravilla su interior, cálido y acogedor, donde se intuye una restauración amable por haber conservado toda la esencia del caserío vasco: cocinas económicas, antiguas alacenas y aparadores al abrigo de gruesas paredes de piedra e imponentes vigas de madera nos hacen viajar en el tiempo.
¡A la mesa!
Josu Mugerza, el chef de Belaustegi baserria, nos había preparado un menú degustación de todos esos caprichos que podemos degustar a su mesa:
➡️ Ensalada de vieiras de Patagonia con vinagreta de Xerez.
➡️ Queso de cabra gratinado con aceite de oliva, miél, sésamo y frutos secos.
➡️ Pulpo a la parrilla con agridulce de miél y pimentón de La Vera.
➡️ Medallones de canguro con su guarnición y salsa Pedro Ximénez.
➡️ Degustación de postres de la casa.
Fue un menú que nos sorprendió de principio a fin, con productos poco habituales, un tanto singulares y preparados con mucho mimo. Una cena que acabó por representar un auténtico viaje gastronómico por los cinco continentes …No me olvido del postre, puede que sirvan uno de los tiramisú más ricos que he probado nunca.
«¡Strepitoso!»
Nosotros terminamos aquí nuestra jornada viajera, pero si nos visitas con la autocaravana y quieres pasar un fin de semana completo, te recomiendo pernoctar en el Camping Itxaspe. Su emplazamiento es uno de los más espectaculares de la Costa Vasca y tiene una piscina con vistas excepcionales.
Si eres viajero independiente a bordo de tu propio vehículo, te invito a quedarte y seguir explorando. Seguro que encuentras un lugar agradable en la oferta de alojamiento rural de Debabarrena.
Esta jornada viajera a lo largo y ancho de Debabarrena fue posible gracias a la invitación de Debabarrena Turismoa para dar a conocer la comarca, su oferta gastronómica y de turismo activo. Eskerrik asko, fue un placer.
Recien estrenada la temporada de sidra, nos apetece un montón probarla, quedar con los amigos, disfrutar del ambiente y saborear una gruesa chuleta a la brasa…Pero, ¿os habéis preguntado alguna vez todo lo que tiene que suceder hasta convertirse la manzana en sidra? Para contároslo os invitamos a La Fiesta de la Manzana, Sagar uztaren festa, en Astigarraga, Gipuzkoa.
Este ha sido un día redondo por el Ensanche de Pamplona. Después de comer en El Colmado , pensamos en qué podríamos llevar a casa de esta visita a la ciudad. Los dulces son algo muy acertado, a lo que pocas veces nos podemos resistir, así que, casi como si un paso le siguiera al otro caminamos hasta llegar al número 28 de la calle Tafalla, en el Segundo Ensanche, para visitar Confituras Goya. ¿Os apetece un dulce?
Dicen que el otoño es ideal para pasear por los bosques, recoger setas o leer un libro bajo los lánguidos rayos del sol. Pero esta vez, queríamos disfrutar de la ciudad, la vida de barrio, las calles y el comercio… Esta vez, nos calzamos las botas de urbanitas para conocer el Ensanche de Pamplona y uno de sus mejores restaurantes: El Colmado. ¿Nos acompañas?
Zarautz es un pueblo costero de Gipuzkoa con sobrados encantos para una escapada en furgoneta camper: su gran playa surfera, parada obligada de los grandes de este deporte en el Pro Zarautz, campeonato mundial de surf que promueve el World Surf League; un elegante malecón donde pasear nuestros lunes al sol; o su espectacular duna y biotopo protegido, Iñurritza. Pero esta vez no hemos venido a nada de eso. Vamos a conocer Zarautz, pintxo a pintxo.
¿Nos sigues en esta ruta de pintxos por Zarautz?
Tras realizar el expléndido paseo por el bosque de Orgi, no hay nada como disponerse a disfrutar de uno de esos placeres que nos brinda la vida: el buen comer. No lo dudéis, en este restaurante encontrareis verdaderas delicias. Os lo contamos… entre platos.
En la carretera que atraviesa Lizaso se encuentra Orgi Jatetxea, un restaurante de estilo rústico donde se sirve una larga lista de delicias. A la mesa de este restaurante encontraremos productos típicos de la zona, como son el Pío Negro confitado (cerdo de raza vasca), el taco de ternera o incluso un completo menú micológico.
Pero si queréis subir al séptimo cielo deberéis elegir de postre mamia.
La mamia o leche cuajada de oveja tiene una elaboración muy arraigada y propia en Euskal Herria. La leche se cuaja en los Kaiku, recipientes de madera de abedul, se sumerge una piedra al rojo vivo para darle un sabor ahumado y se deja enfriar hasta que alcanza la temperatura corporal(en casa introducimos un dedo para saber si ya está listo). Entonces es el momento de añadir el cuajo, que ayudará a dar cuerpo al postre. Finalmente, se puede acompañar de azúcar o miel al gusto.
Un paseo adaptado y un capricho para el paladar ¡Cómo perderse algo así! ¿No os parece?
INFORMACIÓN DE VIAJE: