Una escapada de fin de semana nos lleva, a medio camino entre Palencia capital y la Montaña Palentina, a descubrir los encantos de Herrera de Pisuerga y una gran obra de ingeniería: El Canal de Castilla. ¿Vienes?
Herrera de Pisuerga es la puerta de entrada al norte palentino. La localidad está asentada en la confluencia entre el río Burejo y Pisuerga, donde podemos recorrer parte del ramal norte del Canal de Castilla, y es de gran importancia por ser el habitad natural del cangrejo de patas blancas, el cangrejo autóctono hoy en peligro de extinción por la presencia y amenaza del cangrejo americano y cangrejo señal. Además es muy conocida por su Festival de exaltación del cangrejo de río, fiesta declarada de Interés Turístico Regional.
Mapa de los puntos de interés en Herrera de Pisuerga
La visita más jugosa de esta escapada es sin duda el paseo en barco por el Canal de Castilla, localizada a unos pocos kilómetros al sureste de Herrera de Pisuerga. Allí encontramos un amplio aparcamiento, una pequeña área de recreo con mesas para almorzar y el Centro de Interpretación del tramo correspondiente al ramal norte del Canal de Castilla, tramo que recorre la embarcación Marqués de la Ensenada.
Pero… ¿Qué sabemos del Canal de Castilla? UN POCO DE HISTORIA…
El ministro del rey Fernando VI, el Marqués de la Ensenada, fue el principal impulsor de esta gran obra de ingeniería, la mayor obra de ingeniería de la España Ilustrada, entre los siglos XVIII y XIX donde muchas personas trabajaron con picos y palas como únicas herramientas para su construcción. Tardaron más de 100 años y en realidad no se finalizó, puesto que debería haber llegado hasta Reinosa en el norte y hasta Segovia en el sur.
El Canal de Castilla se construyó para comunicar zonas aisladas entre sí, regar los campos y transportar mercancías, siendo los cereales la más transportada. ¡Imagínate, cerca de 400 barcazas surcaban el canal en su época de mayor esplendor!
El Canal de Castilla fue utilizado para el transporte hasta mediados del siglo XX, momento en el que fue sustituido por el ferrocarril. Hoy día tiene un gran valor patrimonial y todo su recorrido es Bien de Interés Cultural desde 1991.
PASEAMOS EN EL MARQUÉS DE LA ENSENADA Y DESCUBRIMOS EL CANAL
Esperamos con ilusión en el embarcadero a que llegue el capitán y su ayudante para zarpar por el río. Allí nos damos cuenta enseguida de que el barco además es accesible para personas con movilidad reducida o necesitadas de silla de ruedas.
En el paseo en barco además de admirar en vivo la flora y la fauna del entorno, podemos ver un video explicativo de la historia y las curiosidades del canal. Posteriormente el barco se introduce en la esclusa número 6, una de las pocas esclusas en activo de las 49 que se construyeron en el Canal de Castilla, donde somos testigos del proceso de llenado y ascenso para, finalmente, alcanzar la esclusa número 5. ¡Fue increíble! Pudimos revivir el proceso de llenado y vaciado de una esclusa como en los años en que el canal estaba en funcionamiento para el transporte!
Durante el paseo además pudimos jugar y enterarnos de muchas curiosidades gracias al juego interactivo de Marco Topo, del que ya os hablamos aquí. No tenéis más que solicitarlo en el Centro de Interpretación 😉
El barco además es un medio de transporte ecológico, ya que se mueve impulsado por energía eléctrica, de modo que no emite fluidos, no hace ruidos y así evita dañar o molestar a las plantas y animales que viven en el canal.
Pero además de pasear en la barca merece la pena dar una vuelta por el bello entorno del canal. Echar un ojo a la presa de San Andrés, cruzar el encantador puente colgante construido en madera y acero, caminar por el camino de Sirga o asomarse al espectacular mirador sobre el río Pisuerga. Haz algo, cierra los ojos y siente el río.
Si estás pensando en esta experiencia y además vas con la familia, no cometas nuestro error. Llama y reserva (sobre todo en época estival) . Tuvimos suerte de que alguien no acudiera a su cita con el marqués y pudiéramos así finalmente disfrutar de un precioso paseo por el Canal… Avisado estas 😉
¡NOS VAMOS A PESCAR CANGREJOS!
sí, como lo lees, nos vamos a pescar cangrejos. Junto al río Burejo se encuentra la Casa del Cangrejo, el Centro de Interpretación del cangrejo autóctono o de patas blancas. Un edificio que a primera vista ya nos parece singular por fuera y que se divide en tres plantas: en la primera podemos disfrutar de una serie de juegos interactivos que nos proponen diferenciar el cangrejo Burejo (de patas blancas) del americano, reciclar los objetos del río…
Pudimos pasar un buen rato y familiarizarnos con el tema. En la segunda planta del edificio podemos visitar una exposición que recrea el ecosistema fluvial acompañado de tres grandes acuarios, donde podremos localizar los cangrejos retozando por el fondo. La parte explicativa comienza con esta bonita frase: “Erase una vez un cangrejo de patas blancas que vivía tranquilo en su río de aguas limpias y frescas, lleno de comida y refugios…” allí vamos de pantalla en pantalla mirando con curiosidad y atención una serie de documentales que nos ponen de relieve las características, vida y reproducción del cangrejo autóctono (de patas blancas) que hoy día protegido habita el río Burejo, y donde finalmente se revela la importancia de la conservación del cangrejo autóctono para el equilibrio de los ríos.
Ahora que ya conocemos al cangrejo de patas blancas vamos a pescar sus enemigos: el cangrejo americano y el cangrejo señal. Por 2€ en el mismo Centro de Interpretación del río alquilamos unos reteles con carnaza y disfrutamos de la emoción de pescar algún cangrejo, que después hay que devolver al río puesto que se trata de pesca sin muerte.
Además mientras esperábamos a que los cangrejos cayeran en nuestras redes pudimos tomar unas ricas cervezas en el bar y terraza del Centro de Interpretación.
¿Sabéis que además vimos corretear un visón por entre las piedras del río? ¡Tuvimos mucha suerte!
¡AL AGUA PATOS!
Si como nosotros visitáis Herrera de Pisuerga en verano, al mediodía cuando el sol pica, el mejor plan es visitar las piscinas municipales que además están muy próximas al área de autocaravanas. Las piscinas han sido reformadas hace poco, por lo que nos encontramos con aseos y duchas muy nuevas, piscinas con agua fresca y limpia e incluso instalaciones de frontón y pádel anexas. ¿Tentador verdad?
AVIARIO: parque zoológico
Un cartel que reza “Parque zoo” nos intriga muchísimo desde nuestra llegada, así que uno de nuestros paseos lo dedicamos a investigar qué es exactamente. ¿Un zoo? ¿En un lugar tan pequeño? Pues sí, un pequeño zoo de aves que se encuentra integrado en el parque municipal de Herrera de Pisuerga , es de entrada libre y gratuita y coge a aves tan diversas como gansos, cisnes, patos, gallinas, pavos, faisanes, perdices, palomas… Pasamos un buen rato disfrutando del frescor del parque y de la diversidad de este zoo.
VISITAMOS EL CASCO: LA PLAZA MAYOR
No hay nada como adentrarse en el casco de Herrera de Pisuerga para disfrutar de su ambiente popular. Nos detuvímos en una taberna situada en una esquina de la Plaza Mayor para tomar un vermut, que allí es nombrado con la voz “chismorrito” Nos hizo mucha gracia el nombre. Todas las casas que se asoman a la plaza tienen mucho encanto, así como los soportales. Tampoco se nos despistó la fuente central y el Ayuntamiento. Además durante nuestra visita se celebraba un Mercadillo de Segunda Mano donde pudimos encontrar algún que otro tesoro. ¿Qué os parece?
Muy cerca de la Plaza Mayor se encuentra la tienda de ultramarinos Monterrosa, porque no solo de “chismorritos” vive el ser humano… Allí pudimos comprar las riquísimas morcillas de Herrera de Pisuerga, Chocolate Mata, queso y una hogaza de pan de aceite. Hacer la compra en el pueblo y conocer sus productos típicos no puede faltar en nuestras escapadas 😉 ¡Pero nos faltan los cangrejos!
PESCAMOS LOS CANGREJOS… DEL PLATO 😉
No podíamos irnos de allí sin probar el plato estrella del lugar, los cangrejos de río. Para ello la gente del pueblo nos recomendó ir al bar- Restaurante Pisuerga. Es un lugar chapado a la antigua, con una gran colección de premios expuestos en la pared, todos ellos en referencia a la cocina y el preparado de las salsas para los cangrejos de río. Un lugar familiar donde además nos atendieron gustosos cuando ya era tarde. Mil gracias. Lo cierto es que es que además de los cangrejos, que estaban espectaculares, repetimos ese día de morcilla, tomamos una ración de croquetas de jamón caseras, medio pollo asado…Todo un festín por un precio asequible. Un lugar de parada obligada para probar los cangrejos típicos o para darse el gustazo de comer productos típicos sin dejarse la cartera.
LA CAPILLA SIXTINA CASTELLANA
No nos fuimos sin ver la «Capilla Sixtina castellana”, nombre con el que se conoce a la Ermita de la Virgen de la Piedad. Tiene la particularidad de tener el interior completamente repleto de frescos pintados al óleo por el pintor palentino Mariano Lantada (1900 – 1903) donde se representan escenas de la vida de la Virgen. Bóvedas, columnas… ¡No ha quedado nada por pintar! La ermita es un lugar que se nos hizo acogedor, un pequeño templo románico con ese toque de luminosidad y color que le dan los frescos, algo muy especial que no nos hubiera gustado perdernos.
¿DÓNDE PERNOCTAMOS?
Palencia cuenta con muchas áreas de autocaravana y la de Herrera de Pisuerga es todo un lujo: espacio para aparcar y pernoctar junto al río en un lugar con hierba y bajo la sombra de los árboles. Además el área tiene servicio de vaciado y llenado, se encuentra junto al Aula del Río y muy próxima al parque infantil, el aviario, las piscinas y el casco del pueblo… ¡Genial!
Poco podíamos imaginar antes de ir que este pueblo contara con tantos encantos. Herrera de Pisuerga, nos ha sorprendido con su acogedora área de autocaravanas junto al río Burejo, sus especialidades gastronómicas, las variadas actividades para los pequeños y un espectacular paseo por el Canal de Castilla. ¿Os animáis a visitarla? Nosotros ya estamos pensado en regresar a Palencia 😉
Ríos, gastronomía,paisajes etc
Un paseo en barco muy bonito e instructivo. El personal nos atendió estupendamente.